Esas relaciones no sólo con parejas, amigas/os, compañeras/os de trabajo; también hábitos (físicos y mentales), lugares y espacios. Todo aquello que te ayude a soñar más allá de los límites conocidos y colabore con instalar y fortalecer la convicción que de verdad te mereces todo lo bueno; todo aquello que te impulse a avanzar, a pesar de las dificultades, a conquistar nuevos territorios para expandirte y desplegar tu potencial más allá de lo que tu historia te ha hecho creer; ¡todo eso bienvenido sea!
Y lo que no… toma las distancias físicas y emocionales necesarias para cuidarte. Aprende a decir “No”, “No, gracias”, “Estoy bien así”, “No me siento cómoda con esto” para cuidar tu energía luminosa que es preciosa y sagrada. Rodéate, en cambio, de todo aquello que te ayude a alimentarla.
El Universo y todas/os nosotras/os celebraremos ese acto de poner límites, basado en el Auto Amor que estará también nutriendo al Amor que nos une a todas/os.